Cuando crecemos vamos persiendo poco a poco esa cualidad por asi decirlo y empezamos a mentir y guardarnos nuestras verdaderas opiniones sobre los demas, enredandonos en los estandares de la sociedad que nos rodea.
En ocasiones, es necesario retroceder a ese momento en nuestras vidas y hablar con honestidad sobre aquello que nos molesta o nos ocasiona un trastorno en nuestra psique, sin llegar a ser hirientes o prepotentes.
Y es necesario para saber donde estamos parados y ver de que manera vamos a solucionar con la persona que influye en la situacion(es) aquello que nos lleve a una concordia en la relacion ya sea sentimental o laboral, etc.
Y, es que como seres humanos, muchas veces nos olvidamos de usar la boca para llegar a acuerdos, en lugar de realizar suposiciones u acciones, que ofenden y agreden.
Al final, siempre podremos realizar lo que los ninos hacen, cortar la amistad e inicar otra que nos sea mas divertida, mas agradable.
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