Las noticias falsas no son nada nuevo en la política, uno de los mayores ejemplos es el utilizado por Adolfo Hitler en la Alemania Nazi al volar el edificio del Reichstag y acusar a los judíos de ser responsables del hecho, con lo cual justificó su erradicación y encarcelamiento en campos de concentración a través de todo Europa.
En la actualidad el principal conductor de noticias falsas es Facebook, el cual es consultado casi por la mitad de los norteamericanos como fuente de información, a éste sitio web se le ha acusado de ser en una balanza a favor del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
En la antigüedad una noticia falsa como las medicinas milagrosas que se vendían en carruajes a través del viejo oeste necesitaban un poco más de técnicas de convicción a través del contacto directo con las personas que querían escuchar que existía un elixir que alejaría sus males para siempre.
Lo que facilita distribución de noticias falsas en la gran red es el hecho de que la gente busca lo que quiere ver en la misma, de esta manera su criterio se ve reducido al no consultar fuentes alternativas, por ejemplo; una persona que busque noticias negativas del presidente de México, Enrique Peña, será guiada por su buscador de Internet a enlaces que satisfagan ese deseo filtrando todas aquellas noticias positivas.
Por todo lo anterior, nos damos cuenta que todo candidato en la actualidad debe tomar entre sus planes de campaña el manejo financiado de fuentes de Internet, misma que se ha vuelto un arma de injerencia de las potencias extranjeras en dichas campañas, como se supone es el caso de la elección presidencial de los Estados Unidos, el año pasado por parte de Rusia.
Wikileaks jugó un papel importante en la derrota de Hillary Clinton, al hacer públicos correos del partido demócrata donde fueron expuestas las intenciones para denostar a su opositor Bernie Sanders, a través de su ascendencia judía y religión, sin embargo lo que vuelve tendenciosa esta información es el hecho de que no se hayan exhibido documentos del opositor partido republicano.
La televisión tuvo gran influencia en la elección del líder de los Pinos en México, sin embargo en la actualidad las dos empresas más poderosas dedicadas a este medio han visto disminuida sus acciones en más del 50% por lo que quizás ya no sean requeridos al mismo nivel sus servicios por parte de los candidatos presidenciales para las del año siguiente.
Sin embargo esto no quiere decir que en la República mexicana se utilice más el Internet como medio informativo como nuestros vecinos del norte porque como es sabido nuestro país es uno de los que tienen más carencias en cuanto a la cobertura a nivel nacional.
Prueba de ello es que los ataques que ya se han vertido por la gran red contra el virtual candidato del partido movimiento de regeneración nacional (MORENA) Andrés Manuel López Obrador, no han tenido mayor impacto quizás por el descontento de la gente, quizás porque son noticias falsas o quizás porque desaparecen casi de inmediato entre tanta y tanta información qué hay.
Luego entonces las estrategias a seguir por parte de los partidos políticos para posicionar a sus candidatos deberá hacerse por estados, viendo que grupos sociales de los mismos son los que más votan, analizando porque medio se enteran ellos de las propuestas, que problemas son los que requieren una solución urgente en sus perspectivas y en base a ello generar una campaña política efectiva.
De tal manera, una vez elegidos y con miras a un puesto mayor estos candidatos deberán cumplir las promesas que estén más a la mano y que puedan hacer públicas para crear una percepción de que se ha cumplido todo aquello que se comprometió a solucionar en campaña.
Y es que en país con un electorado de frutsis y lonches o venta del voto al mejor postor es muy difícil comunicarse o tener empatía con las clases más marginadas a través del diálogo o la información ya que las mismas se han mentalizado a que todos los que llegan a un cargo público sólo van a robar.
Y aquí es donde cabe hacer las preguntas sobre el sufrido pueblo de México ¿que noticias falsas le pueden interesar? ¿Donde las podrá conocer?¿cuántos las podrán siquiera leer?.
Por lo tanto, llegamos a la conclusión de que las noticias falsas son un arma política muy efectiva sabiéndolas canalizar a través de lo que la gente quiere escuchar o ver en los diferentes medios, este hecho reafirma aquella vieja frase de los abuelos que dice "difama que algo quedará".